“Cuando beso tu cuerpo
siento latir el corazón profundo
de la vida”
Marsha Kathrina
Y yo, latía…
Latía en lo más profundo de ti.
Tú sentías…
Me sentías como la llama
que carboniza el amor.
Como los besos
que queman tu boca.
Profunda vida...
Hundida ilusión.
Canta la niebla
sobre la oscura noche:
Terciopelo de un cielo
plagado de luciérnagas.
Brillan las estrellas
mientras mis ojos se miran
en la laguna de los tuyo.
Llora la niebla al resbalar
sobre el sereno.
Suspira el búho
que mira esperando…
Que salga la luna.
Me asechaba el alba
sin tregua al amor…
Hiriéndome:
Con sus pétalos rosa
y espinas abriendo
en mi corazón un camino:
Fuego y pasión.
Quemado por amor y herido
por ardientes dagas,
mi corazón:
Inerte, adolorido.
Sensible a sus caricias,
enamorado amándole...
Se dejo vencer.
Así, herido y adolorido,
si vivo cien años…
Cien años he de vivir en ti.
Tienes en la piel las huellas
de mis besos.
Brechas...
Caladas por mis dedos.
Deseos encayados
en la ausencia
sin importar el tiempo...
Anclado en el surco del amor
soy parte de tu ser.
