(…) “Permíteme besarte con mis
versos y conjugar mis besos con tu voz entre suspiros”. (…)
Rosario Isabella
Cuando los rayos rosa de luz
del alba se escondan bajo
la sombra del ocaso ocra
al esconderse el sol tras la luna...
En esa oscuridad mis besos jamás
se convertirán en olvido.
Entre las sombras sentirás
como un fuego:
Al respirar y beber de ellos.
Si mis besos
te traen consuelo
aquí estoy para besarte
una y una vez.
Que ternura en tu mirar
cuando
decías, quiero amarte
al
besar mis labios
y
suspirar mi quedo.
Cuanto
amar había entre
tus
senos. Entre ellos sentía
que
tus besos eran mi cielo,
que
por mis venas corría
algo sublime. Era tu amar
fundiéndose
dentro de mí.
Tengo
tan rojo y ruborosos
mis
labios que estallan como
frutas
maduras en tu boca.
Racimos
de amor brotan
de ellos cuando
beso
los tuyos y se deshacen
en
tu boca:
Come dulces cerezas.
Sangran
al amar
los frutos rojos de mis labios.
Estallas
en mis besos
y cálidos deseos. Te
bese...
Tan lentamente como beber
del
fondo de tu alma
como sorber un
vino añejo.
Al amar,
te
suspire mis anhelos…
Y
te volviste silencio.
Te
bese con todo el amar
de
mi alma.
Te ame...
A besos
sellando todo el amar
en
mi corazón donde
vives eternamente
con
ese eterno deseo:
Oculto bajo la sombras