Los instantes perdidos,
aquellos meditados añejos
en el olvido. Marea que se traga
la difusa línea entre el recuerdo
y el silencio. Pasará lo inevitable,
pasará con el viento y te abrazaré.
Abrazos que se escapan
A nuevos tiempos. …
Ya no vuelven.
Y vuelas por despertar
a la salida, esta vez ventana
donde a un soplo de esperanza
calma en su serena armonía.
Clamor de escapar y volver
a sentir el aroma de tu ser…
Y al calor de la vida respira
el cálido abrazo de la arena
en verano, y la brisa del sueño
en el rosado ocaso al otoño
de tus senos ondulado.