tus carnosos labios rojos.
sendero resbaloso que conlleva
a los rincones profundos G.
Aquel donde…
Mana la esencia al placer
con agridulce salmuera amarga.
Lo más bello seria poder desnudar
mi alma ante el sensual
deseo que acongoja mi sed:
Desinhibe de loco poeta,
preludio de noche embriaga
tu copa con el aroma al canto
y mi incandescente lujuria
abismal al sorbo
de tu Cádiz ardiente al deseo.
Seré caricia vertida,
los besos…
Que nunca
acabaron.
Abrazo que te
busca,
verso sutil
de mi pluma.
El adiós…
Que nunca nos
dimos,
la voz que
susurre armonía.
El amor que
permanece intacto,
los brazos
que sujeten tu caída.